¡Ay, qué intenso es el espíritu olímpico!
Tanto así que hoy la escuela donde trabajo decidió aceptar como alumna a una nena de 4 años completamente china, con nombre chino y nombre argentino (Vanesa). No habla castellano: sólo dice "nena", "nene" y "caramelo". Además, se dibuja a sí misma con dos rayitas como ojos. La vi de lejos. Es hermosa.
El lunes empieza, y la conoceré más.
Ya les contaré si habla mandarín o cantonés.
Tanto así que hoy la escuela donde trabajo decidió aceptar como alumna a una nena de 4 años completamente china, con nombre chino y nombre argentino (Vanesa). No habla castellano: sólo dice "nena", "nene" y "caramelo". Además, se dibuja a sí misma con dos rayitas como ojos. La vi de lejos. Es hermosa.
El lunes empieza, y la conoceré más.
Ya les contaré si habla mandarín o cantonés.
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