Ruptura

Como si no se hubieran dado cuenta, mis escasos lectores, les cuento que hace unos cuatro meses estoy llorando una ruptura. Tenía un novio hermoso, sexy, inteligente, interesante y todo eso que las mujeres queremos. Pero me dejó. Lloro un poco todos los días porque pienso que no va a haber ninguno como él, que no voy a mirar a los ojos nunca más así, que ese... "feeling" no va a aparecer nunca más, que nadie me va a hacer el amor como él, bla bla bla. Y también pienso: ¿Yo merezco un tipo que me rechaza? ¿Yo merezco llorar por alguien que puso los sentimientos sobre la mesa y después los escondió? ¿Yo merezco seguir duelando la muerte de algo que él no quiso que existiera?

Su abandono fue muy confuso en algunas cosas pero muy claro en otras: dijo "vos seguís pensando en el principio de la relación como si hubiera sido la mayor parte de ella". ¡Durísimo! Sí, pienso en eso porque fue hermoso. Lo más hermoso que viví. Pero, como fue hermoso también para él, un ser que aborta las cosas hermosas vaya uno a saber por qué trauma personal, destruyó todo en un santiamén. Le importó tres belines que mi corazón estuviera en medio de sus deseos des-deseados. Y a mí también. Porque vi que era mezquino conmigo y me quedé. En ese entonces ya pensaba "¿Merezco al lado un tipo que me fascina pero al que no le fascino?". Y, no. Pero la pregunta que no me quería hacer, ni a mí misma, era: "¿Por qué me fascina?".

Sí, me sigue fascinando. A toda minitah, así, con h final de pelotuda, nos fascinan los tipos recios, reacios, a amarnos, a cuidarnos, a ser demostrativos. Nos atrae ese halo enfermo del tipo complicado. Pasquali, gran docente y psicólogo, me dijo que nos atrae la idea de "curarlos", de "sacarlos buenos". Ese ha de ser mi subconsciente, pero a mí lo que me atrajo de él era él, así como era, copado y extra generoso, antes de que se convirtiera en un bloque de hielo. Sí, me sigue fascinando, pero hoy me levanté y me dije "esto también pasará".

Yo creo que, para esta hora, ya me encontró reemplazante, pero no es mi problema. Esa es la otra frase con la que me desperté hoy: "No es mi problema". Mi problema es que está instalado en mi corazón y que hay que sacarlo de acá. Porque no quiere estar y yo ya no quiero que esté. Quiero estar libre para enamorarme de quien me fascine y yo le fascine y que no tenga miedo de tener la mejor relación de su vida. Y ese es un miedo que yo también tengo y tengo que trabajar sobre él.

Quiero agradecer a estas cosas y personas que me ayudan en mi camino a desalojar a esta persona de mis pensamientos y de mi corazón:

- Grey's Anatomy

- Twitter

- Ausencia mía en Facebook

- Atados incontables de Jockey Suaves

- Clases de danza

- Recitales

- Haber soñado que cocinaba y comía un huevo frito en vez de soñar con él

- Mamá

- Hilario González

- Eliana Rivero

- Sabrina Hardy

- David Hardy

- Papá

- Abuela

- Mac Medina

- Terapeuta

- Priscila MacKenzie

- Alumnos, mis personas favoritas en el mundo

- Sergio San Miguel

- Carlos Piñero

- Tobías Monte

- Juan Kathrein

- Sergio Fernández

- Michael Jackson

Si volviésemos a hablar, seguro me diría "cerrá el capítulo y superalo". Pero no quiero hablar con él. Me duele mucho. Muero una, dos, tres veces por día por llamarlo y contarle del amor grande que tengo por él, pero no tiene ningún sentido.

Ya no creo en nada: ni en la intimidad, ni en la privacidad de mi dolor, ni en la profundidad y veracidad de los sentimientos de las personas. Hasta que vuelva a creer en el amor, falta un montonazo. Me han criticado por hacer públicos mi ruptura y el dolor que me causa, pero ¿para qué cuernos sirve la interné si no? ¿Eh?

Si la puta casualidad te hiciera leer esto a vos, persona que amo e intento olvidar, te diría esto:

"Qué lástima, hermosis. Qué lástima. A pesar de todo, extraño todo. Sí fluíamos. Después de que abrí mi corazón, vos lo cerraste y dejé de entender todo. Me desesperé y en vez de dejarte tu espacio, te mendigué cariño. Eso no se hace. Si te queda alguna pizca de amor para mí, y algún día te dan ganas de volver a abrir el corazón a una historia hermosa, hacémelo saber. Es muy probable que te siga queriendo para ese entonces. No nos fue mal, en absoluto. Ni siquiera probamos que nos fuera bien. Nada más basta abrir el corazón, sin quilombos. Creo que es eso. Nada más. Te amo, ¿sabés? Te amo desde el primer momento en que te vi la cara."