domingo, 16 de octubre de 2011

La marginalidad del otro

Queridos no lectores:

me encuentro atravesando una situación absurda: cuando mis vecinos se cuelgan del cable, se llevan consigo la fibra óptica necesaria para que yo tenga cable + internet. Lo que siempre faltaba al regresar a mi casa era internet; el cable se veía muy mal.

Decidí dar de baja el servicio de internet y no he logrado aún comunicarme con Telecom para que me den línea telefónica + Arnet. Estoy de lo más indignada con todo esto.

Extraño mucho hacer mis entradas al blog. Extraño estar en mi casa googleando imágenes para mi laburo, escuchando música online en Grooveshark, tuiteando y chequeando que nuevas taradeces ponen en Facebook las personas.

No puedo creer que la conducta de lo demás implique tantas cosas negativas en mi vida: no me dejan gritar ni escuchar música ni tener Internet. ¿Qué más se van a llevar? Si un día de estos me entran en la casa, los denunciaré a la policía sin dudar de su autoría intelectual.

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