lunes, 9 de marzo de 2009

Backstreet Boys en Luna Park - Martes 3 de marzo, 2009

Algunos dijeron que el que se fue de Backstreet Boys fue Justin. Otros aseguraban que se habían separado. Otros más comentaron que habían muerto. Y que eran putos. Toda clase de comentarios recibí cuando dije "el 3 de marzo voy a ver a Backstreet Boys". Hasta algunos deben haber pensado que me iba a ir a verlos al extranjero.

Si no fuera por Vicky, ni me hubiera enterado. Detesto los clubes de fans y lo enfermos que son y que te ponen, porque si entrás en la vorágine querés saber hasta a qué hora suelen ir al baño a hacer lo número dos. Ni el Luna Park, ni Ticket Portal, ni nadie promocionó nada. Pero en un mes de venta, las entradas se agotaron.

Y tal como lo indicaron las ventas, no cabía ni un alfiler. Cintia, Sabrina y yo no entrábamos en razón: sí, sí, son los Backstreet Boys, BSB para los amigos. Sabri decía: "Seguro son los Boxstreet Boys, que hacen covers. Debe ser todo mentira." Teníamos motivos para pensar así: pasaron casi nueve años desde el último show, en River, con varios asientos vacíos.

Pero después del aguante hecho por Custodios (bien recibidos por las fans) se apagaron las luces y empezó el griterío. Todo quedó en penumbras, exhibiendo tan sólo tres telones negros que parecían agarrados con pinzas. Se prendieron cientos de cámaras y celulares, y era increíble pensar que esta vez te los llevabas a tu casa. Sí, esta vez podías entrar con cámara y llevártelos de recuerdo. No tenían sentido los vendedores en la puerta ofreciendo fotos: ahora tenemos Internet. Recordé tanto todas las revistas compradas, incluso te vendían en Florida hojas de mags importadas por 30 centavos. Y pasear por Galería Jardín a mirar las vidrieras llenas de singles con lados B que no podía bajar de Internet porque no tenía cómo escucharlas. Se acabó todo: Argentina se tecnologizó y ahora recibir a los Back era distinto. Mejor.

Cuando se cayeron los telones, ahí estaban ellos, ahora cuatro (porque se fue Kevin, no Justin), envueltos en batas blancas, cada uno con ribetes de distinto color (azul, amarillo, rojo y negro). Nos daban la espalda para que gritemos más y más, y con esos gritos se llenaban de energía, como en Monsters Inc. Un ring ocupaba el centro del escenario mientras en la pantalla se veía a los luchadores (que la siguen peleando, aunque ya no estén al tope de ningún ranking) anunciados por un presentador en off. Los nombraba a cada uno de ellos: Brian Littrell, Howie Dorough, Nick Carter y A. J. McLean, y tal como lo decía el tipo y como yo no lo creía, estaban ahí, parados, más cerca de lo que jamás los vi, aunque mi asiento era una cagada.

Al voltear, pudimos comprobar que eran ellos, los únicos y originales, joya, nunca taxi. Increíble. Grité tanto que me dolía la mandíbula. El tema Eye of the tiger, típico del box, tan típico como el Luna Park mismo, les sirvió de sample para empezar con Larger than life, tema escrito para las fans que les hacen el aguante. Y pegado, sin respiro, Everyone, que es tanto para fans como para detractores. Y se los veía más o menos así:

Con tanto zoom mis fotos eran una basura fuera de foco. Yo pensaba que ahora que están viejos y medio pasados en kilos no iban a bailar más. ¡Qué no! No sólo bailan todavía, y bien, sino que hay coreos nuevas y cuando bailaron las viejas-viejas a todas se nos piantaron lagrimones. Nos tuvieron 105 minutos así, un tema atrás del otro, tomá y tomá, gritá y desarmate, llorá y amame. Varios de los temas que hicieron salían de su último álbum, Unbreakable. Y para ellos estuvo buenísimo que los cantáramos. Otro de mis pensamientos era: ¿cómo van a mantener la chispa cuatro tipos con mucha voz y sin fuegos artificiales? Con eso: con la voz, de ellos y nuestra, porque saben que van a decir "hola" y vamos a gritar; saben que van a saludar con la mano y vamos a gritar; saben que van a hacer alguna carita tierna y vamos a gritar.



¿Sabés qué temas hicieron? Los que conocen todos: Quit playin' games, I want it that way, Show me the meaning of being lonely, Everybody y hasta su versión en castellano de I'll never break your heart. Ah, no paro de morir de amor. Y también hicieron los temas que conocemos nosotras solas, y los cantamos hasta quedar sin garganta.


En este show vi a cuatro amigos que se adoran como hermanos, sencillos, superados, dispuestos a reírse de sí mismos, pasándola bien y haciendo lo que más les gusta hacer en el mundo: cantar canciones para que las chicas griten. Y para que se notaran los favoritismos, cada uno salió a hacer su temita solo. Y Nick sigue robando. Ni hablar de lo bueno que se puso: ¡está tremendo! Se le fue la cara de niño y ahora quedó un hombre por demás encantador. Estaba especialmente enérgico, saltarín y contento. Y Brian, tan tierno que te casás. Howie, metiendo sus palabritas en castellano para que lo amemos más. A. J., meneando una panza sexy que le queda muy sexy.

El final nos deparaba sorpresas. A nosotras y a ellos. Todo terminó con un bis que fue Shape of my heart. Ahí salieron con la obligada camiseta de la AFA, con el ahora obligado número 18 en la espalda. Y las chicas los sorprendieron con carteles que salieron desde todos los rincones rezando "thank you 4 coming back". Fue una movida que se armó en Internet con gran éxito.

Y así nomás se fue la noche, en un santiamén. Odio a todas las que estuvieron adelante y amo todo lo que hicieron los 4 de Orlando sobre el escenario. Odio lo feas que me salieron las fotos y amo haberme quedado sin voz de tanto grito. Odio la ubicación horrible que conseguí y amo todas las canciones que me cantaron estos guachos. Odio que ahora falta andá a saber cuánto para que vuelvan (porque prometieron disco nuevo para este año y nueva gira) y amo que hayan venido por cuarta vez a mi tierra. Y los amo. Los amo y los amo y recuperé toda el fervor de cuando tenía 10 materias en la secundaria, cuando mis separadores estaban atestados con las caras de ellos, cuando por fin llegaba el sábado para intercambiar material en la Plaza San Martín, cuando las fotos se sacaban con rollo y cuando tuvieras plata veías lo mal que salían. Amo mi vida y la parte linda de ella que los Backstreet Boys son. Y cuando arregle la videocasetera me pongo a ver mis once VHS llenos de cosas de ellos.

Luv ya, Boys.



4 comentarios:

lahijadelsilencio dijo...

Ayy nenaaa se lo mucho que los amas y me encanta que hayas podido verlos y que estes TAN FELIZ ... y ya te dije para la prox te acompaño y veo al yeguo de AJ ( que debo decir .. se parte en el banner de este blog )

Y no me agradezcas que te haya avisado gilita... si no me costo nada ;)

Hermosa entrada de este hermoso blog..

besooossss

La que suscribe dijo...

Me encantó!!!!!
Y como te dije recién me contagiaste de tanta energía Backstreetense, que me pasé todo el día de ayer, escuchándolos...
Si hay próxima, prometo que voy...
Te amo, Golph!

Iriel dijo...

¡Qué dulzura de entrada!

Por fin encontré lo que quería... saber cómo fue esa noche ^^ Admito que hasta tenía ganas de ir. Los BSB me acompañaron mucho tiempo, muchas locuras con mis amigas, muchas tardes de grabar videos de ellos, y otras muchas tardes de rever el material. La pieza llena de pósters, y darle un beso de buenas noches a cada uno... Hay cosas que no se olvidan...

Qué bueno que fuiste!!! Y que la pasaste tan bien!! :D

Anónimo dijo...

Me hiciste LLORAR. Consegui un asiento de mierda pero fue el mejor recital de mi vida. No los pude ver antes ni en argentina ni en ningun otro lado por cuestiones que no vienen al caso, y al leer tu post revivi cada momento de esa noche maravillosa que la espere por 10 años. Gracias!
(Nattie, de polyvore)